1. Conocer el precio medio de la zona.
Los chollos existen, pero primero se debe sospechar de aquellos anuncios que se encuentren muy por debajo del precio medio de la zona. Por eso, a la hora de buscar vivienda de alquiler es importante consultar el precio que tienen otros inmuebles de similares características en el mismo barrio o consultar los precios de Inmobiliaria MJ para hacerse una idea del valor que debería tener.
2. No entregar dinero antes de visitar el piso.
No se debe entregar un adelanto antes de visitar el piso, por mucha prisa en alquilar que muestre el anunciante argumentando una gran demanda. Si no, el inquilino puede encontrarse con que ha alquilado el piso en unas condiciones diferentes de las que pensaba o que ni si quiera existe tal inmueble. No se debe dar dinero o firmar el contrato sin antes haber comprobado el estado del inmueble, la ubicación, el número de habitaciones, si hay desperfectos o si tiene dados de alta los suministros, entre otras cosas.
3. Hacerlo todo por escrito.
Siempre que se cierre un trato con alguien tiene que quedar constancia por escrito y que cada una de las partes implicadas se quede una copia firmada.
4. Revisar bien el contrato antes de firmar.
Antes de firmar hay que leerse bien las condiciones del contrato: hay que tener claro cuál es la renta mensual, la duración del contrato, los gastos a pagar por cada una de las partes, quién se ocupa del mantenimiento de la vivienda, …
5. Conocer los derechos del inquilin@.
Lo mejor, para evitar cláusulas abusivas es conocer de antemano los derechos y obligaciones como inquilin@s. Aunque parezca un detalle insignificante en ocasiones se han dado circunstancias en las que un inquilin@ ha alquilado una vivienda en comunidad con piscina, pero sin tener derecho a ella. Antes de firmar ningún papel, es importante aclarar los derechos que tiene el inquilin@ por ley y/o por contrato y que estas consten específicamente en él.